Sueño al volante. Cómo evitar la somnolencia al volante

Si vas a conducir de noche sobre todo, ten en cuenta ciertos aspectos que pueden provocarte somnolencia al volante. Uno de los factores de riesgo más importantes a la hora de conducir no es otro que el sueño al volante. Te damos algunos consejos que pueden serte muy útiles como conductor.

Fecha: 23/12/2020
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Uno de los factores de riesgo más importantes a la hora de conducir no es otro que el sueño al volante. Los bostezos, la falta de reflejos, la lentitud y otros síntomas de cansancio al conducir pueden jugarte una muy mala pasada si no les pones freno y remedio antes.

Por eso, si vas a conducir de noche sobre todo, ten en cuenta ciertos aspectos que pueden provocarte somnolencia al volante. Para intentar evitarlo, te damos algunos consejos que pueden serte muy útiles como conductor.

Consejos para evitar el sueño la volante

Si bien es cierto que el ser humano no puede dejar de dormir, existen ciertos tips y prácticas que pueden ayudarte a plantarle cara una vez te pones manos al volante. Esto conseguirá que, si tienes que conducir durante varias horas, puedas hacerlo sin miedo a quedarte dormido. ¡Atento!

  • No conduzcas en tu horario habitual de sueño. Si normalmente acostumbras a dormirte de 11 a 7, con sus 8 horas recomendadas, evita conducir en esa franja horaria. Por la noche es más normal que pueda entrarte el sueño al volante, así que intenta evitarlo todo lo que puedas y deja la ruta para primera hora de la mañana.
  • Mantente hidratado. Bebe agua con frecuencia cuando estés conduciendo por la noche. ¡Eso sí! Evita soltar el volante con las dos manos y utiliza únicamente una para coger la botella de agua. Mantenerte hidratado va a ayudarte a plantarle cara a la somnolencia, pero no queremos que desatiendas el volante por ello.
  • Busca aire fresco. Seguro que te has dado cuenta, ¿verdad? Un buen soplo de aire fresco te despeja bastante cuando el sueño amenaza con hacer acto de presencia. Por eso, utiliza el aire acondicionado o baja las ventanillas para que disminuya la temperatura en el interior del coche.
  • Para cada dos horas de conducción. Es lo recomendable en cualquier viaje largo y evita posibles distracciones al volante por cansancio. Si puedes parar en un área de servicio con cafetería, aprovecha para tomarte un café o una bebida energética. Si en el camino no encuentras estos espacios, baja del vehículo y camina unos minutos. Estira las piernas antes de volver al coche y seguir tu ruta, te aseguramos que notarás cierta relajación y tus piernas lo agradecerán. Además, la sensación de somnolencia y cansancio desaparecerá al distraerte ligeramente de la conducción durante unos minutos.
  • ¿Tienes mucho sueño? Duerme unos minutos. ¡Pero no al volante! Aprovecha la parada anterior para echar una pequeña cabezadita en el asiento de tu coche. O si ves que no puedes evitarlo más, haz una parada extra para descansar. Si el sueño ha hecho acto de presencia y no puedes ponerle freno, lo mejor será que descanses nos minutos. Tras una pequeña siesta, aprovecha para estirar las piernas y refrescarte con agua fría antes de seguir tu camino.
  • Habla con tu acompañante. Si vas acompañado en el coche, va a ser más fácil que no te entre el sueño, porque tu copiloto o el resto de integrantes del vehículo te podrá dar conversación. Aprovecha esta compañía para hablar de cualquier tema durante el máximo tiempo posible. No decimos que estéis todo el camino hablando y lleguéis sin voz a vuestro destino. Pero si notas que te entra cierta somnolencia al volante, sé el primero en sacar tema de conversación.
  • Canta en voz alta. Si por el contrario viajas solo y eres el único pasajero del vehículo, va a ser complicado hablar con alguien -si no es por teléfono en manos libres-, así que hay que buscar otra alternativa. Ponte tu música favorita para viajar y conviértete en cantante de éxito. Tararea y canta las canciones que suenen en voz alta para darle ritmo a tu viaje y hacerlo más ameno y menos aburrido, ya que el aburrimiento al volante suele ser uno de los principales motivos por los que llega el sueño. ¿Y qué mejor manera de evitarlo que con buena música? Haz tu lista de reproducción para ese viaje largo que tienes en mente, y en cuanto notes un solo síntoma, dale al play. ¡A cantar!
  • Evita conducir con el estómago lleno. Como sabrás, después de comer tenemos una sensación de somnolencia absoluta. Y ese ratito tumbado en el sofá con el estómago lleno es una de las cosas que más se echa en falta si tienes que conducir nada más comer. Evita comer de forma pesada si has parado en un área de servicio en tu viaje, porque conducir con el estómago lleno o en el proceso de digestión puede generar bastante sueño al volante. Busca comidas ligeras, intenta tomar un tentempié más que una comida completa e intenta alargar tu parada todo lo posible para asegurarte de que tu estómago no se va a aliar con el sueño.

Además de estos consejos, recuerda que también puedes llevar unas gafas para conducir de noche con un cristal amarillento para evitar alumbramientos de las luces de los coches o de señalizaciones concretas. Te ayudarán a proteger tu vista, haciendo tu conducción más segura y fiable.