Mantenimiento periódico
Con el paso de los años, cada vez son más los fabricantes de automóviles que alargan los periodos de mantenimiento de sus vehículos (en tiempo o en kilómetros).
Este hecho unido a la despreocupación de muchos usuarios hace que numerosos vehículos sufran averías antes siquiera de llegar a las fechas de mantenimiento recomendadas por los fabricantes.
Hay una práctica extendida entre numerosos conductores, que evitan hacer cualquier tipo de tarea de mantenimiento o comprobación básica de su vehículo, dejando la responsabilidad solo a la propia electrónica del vehículo (testigos o mensajes en el cuadro de mandos) o en el cumplimiento de fechas o kilómetros establecidos para el mantenimiento por parte del fabricante del vehículo.
Este hace que en ocasiones, se encuentren con averías de motores por falta de una correcta lubricación o calentamiento excesivo que podrían haberse detectado si se hubiese realizado una simple comprobación con la varilla de aceite o verificado el nivel de líquido refrigerante. O un accidente debido a un desgaste prematuro de los neumáticos por no realizar una sencilla tarea como realizar las comprobaciones necesarias para mantenerlos en la presión adecuada.
Quizá les falta un mayor conocimiento y concienciación, de los propietarios de alguno de estos conceptos básicos para evitar males mayores, dando si cabe la misma importancia que al uso de dispositivos y accionamientos del vehículo.
Caso aparte son aquellos usuarios que por varias razones, alargan los periodos de mantenimiento de sus vehículos, haciendo lo que se llama un “mantenimiento por rotura”. Esto además de ser perjudicial para el vehículo resulta una práctica muy peligrosa por la elevada probabilidad de exponerse a un accidente por un fallo en su vehículo.
Redactado por A. Alcolea Horno